JACD
Diamante
No se recuerda un desastre de tales proporciones en toda la historia de la telefonía móvil, más aún tratándose de un fabricante del peso de Samsung, el actual líder del mercado con casi uno de cada cuatro teléfonos vendidos en el planeta. El camino del Galaxy Note 7 ha sido accidentado desde que comenzaron a surgir los primeros problemas con sus baterías, y ha acabado como el fabricante retirando todas las unidades ya vendidas o almacenadas por los distribuidores.
El problema que afronta ahora el gigante coreano no es pequeño pues su lenta reacción en todo el proceso que ha desembocado en el alto a las ventas ha dañado la imagen del terminal, y posiblemente de toda su familia. Si los primeros accidentes y el primer recall fueron dañinos para la compañía, los modelos de reemplazo que volvieron a mostrar problemas han sido definitivos. Samsung debería eliminar la línea.
El problema que afronta ahora el gigante coreano no es pequeño pues su lenta reacción en todo el proceso que ha desembocado en el alto a las ventas ha dañado la imagen del terminal, y posiblemente de toda su familia. Si los primeros accidentes y el primer recall fueron dañinos para la compañía, los modelos de reemplazo que volvieron a mostrar problemas han sido definitivos. Samsung debería eliminar la línea.
Un problema de imagen difícil de gestionar
Llegados a este punto, y una vez que los problemas de imagen de un modelo trascienden los medios puramente tecnológicos, tal vez lo mejor sea cortar por lo sano. Lo que podrían haber sido unas cuantas unidades dañadas y una retirada a tiempo y sin tanto ruido se ha convertido en avisos desde los medios de comunicación generalistas, los que realmente calan en la memoria colectiva, para que se apague el terminal ante riesgo de explosión. En algunos casos no se mencionaba humo, ni que podría arder. Su usó el término combustión.
Las aerolíneas han acrecentado aún más la imagen de un Galaxy Note 7 que será recordado como el móvil que ardía. Un terminal que recibió las mejores calificaciones en análisis que se le recuerdan a Samsung y que puede ser el causante de que su línea haya llegado hasta aquí. Así debería ser pues la memoria de la población es selectiva. De igual forma que muchos usuarios no saben que su terminal es un Android y piden "un Galaxy" al llegar a las tiendas, desconociendo en muchos casos que los modelos son muchos y muy variados, lo que quedará en la memoria de todos es que los Note explotaban. Los Note, no un modelo concreto.
El daño a la imagen de toda la línea puede ser irreparable y quizá a Samsung le convenga reconducir la situación. El nicho de usuarios que acude al Note año tras año en busca de las ventajas de su capa y su S Pen no debe olvidarse y por eso Samsung debería integrar los Note dentro de la línea S. No como S Note, pues el apellido arrastraría la mala imagen anterior.
Las aerolíneas han acrecentado aún más la imagen de un Galaxy Note 7 que será recordado como el móvil que ardía. Un terminal que recibió las mejores calificaciones en análisis que se le recuerdan a Samsung y que puede ser el causante de que su línea haya llegado hasta aquí. Así debería ser pues la memoria de la población es selectiva. De igual forma que muchos usuarios no saben que su terminal es un Android y piden "un Galaxy" al llegar a las tiendas, desconociendo en muchos casos que los modelos son muchos y muy variados, lo que quedará en la memoria de todos es que los Note explotaban. Los Note, no un modelo concreto.
El daño a la imagen de toda la línea puede ser irreparable y quizá a Samsung le convenga reconducir la situación. El nicho de usuarios que acude al Note año tras año en busca de las ventajas de su capa y su S Pen no debe olvidarse y por eso Samsung debería integrar los Note dentro de la línea S. No como S Note, pues el apellido arrastraría la mala imagen anterior.
Fuente:xatakamovil.com