Esa escena en una película en la que un preso sólo tiene una llamada telefónica y algunas visitas como única forma de comunicarse con el exterior es historia.
Los presos podrán utilizar tablets para conectar con el mundo exterior, cómo esta de JPay,la JP5mini.
Este dispositivo, que está muy bien asegurado como muestra la imagen de arriba, permite a los prisioneros escuchar música, aprender y conectar por correo electrónico con sus familiares y amigos.
El concepto detrás de este producto es que la comunicación con los seres queridos pueda mejorar las relaciones, y que así sea mas fácil reintegrar a los reclusos en la sociedad después de su puesta en libertad.
Alrededor de 60.000 unidades del JP4, el predecesor de la JP5mini se están utilizando en 11 estados de EE UU.
El mini JP5 ha sido adoptado de momento por los establecimientos penitenciarios de Idaho y Nueva Jersey.
Esta nueva tablet es superior en cuanto a gráficos y potencia de cálculo, además, viene con 32 GB de ROM, lo que supone cuatro veces más que su predecesor.
Los internos podrán comprar uno de esos dispositivos a 69.99$, a travésde e un quiosco en sus instalaciones, o lo podrán comprar amigos o familiares por ellos.
JPay también permite a las cárceles crear pautas para el filtrado de mensajes al exterior. Por ejemplo, palabras como "escapar", nombres de bandas o argot están prohibidos.
A los presos de cierto nivel de riesgo no podrán tener estas tablets, lógicamente.
El gestor de arranque que usan es seguro, así, no se puede instalar otro sistema operativo y, la versión de Android icluida, no podrá modificarse. Ten en cuenta que no hay acceso a Internet, salvo las conexiones inalámbricas habilitadas por la prisión.
Los presos podrán utilizar tablets para conectar con el mundo exterior, cómo esta de JPay,la JP5mini.
Este dispositivo, que está muy bien asegurado como muestra la imagen de arriba, permite a los prisioneros escuchar música, aprender y conectar por correo electrónico con sus familiares y amigos.
El concepto detrás de este producto es que la comunicación con los seres queridos pueda mejorar las relaciones, y que así sea mas fácil reintegrar a los reclusos en la sociedad después de su puesta en libertad.
Alrededor de 60.000 unidades del JP4, el predecesor de la JP5mini se están utilizando en 11 estados de EE UU.
El mini JP5 ha sido adoptado de momento por los establecimientos penitenciarios de Idaho y Nueva Jersey.
Esta nueva tablet es superior en cuanto a gráficos y potencia de cálculo, además, viene con 32 GB de ROM, lo que supone cuatro veces más que su predecesor.
Los internos podrán comprar uno de esos dispositivos a 69.99$, a travésde e un quiosco en sus instalaciones, o lo podrán comprar amigos o familiares por ellos.
JPay también permite a las cárceles crear pautas para el filtrado de mensajes al exterior. Por ejemplo, palabras como "escapar", nombres de bandas o argot están prohibidos.
A los presos de cierto nivel de riesgo no podrán tener estas tablets, lógicamente.
El gestor de arranque que usan es seguro, así, no se puede instalar otro sistema operativo y, la versión de Android icluida, no podrá modificarse. Ten en cuenta que no hay acceso a Internet, salvo las conexiones inalámbricas habilitadas por la prisión.
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