GregorioS
Diamante
La noticia que estáis leyendo a continuación es el ejemplo perfecto de lo que significa ahogarse de éxito. LeEco es una firma china que todos conocemos a estas alturas, y que lamentablemente no está pasando por su mejor momento. Leshi Holdings –a.k.a. LeEco– está afrontando una enorme crisis financiera, puesto que su expansión ha sido tan descontrolada que han dejado de lado sus obligaciones de pago, lo que ha llevado la empresa a ser denunciada por Haosheng, su fabricante de altavoces.
Según informan en el South China Morning Post, la unidad de fabricación de teléfonos móviles, LeMobile, ha sido denunciada por Haosheng por una deuda de 51,74 millones de yuanes, que vendrían a ser casi 8 millones de euros con dicho proveedor. Por lo visto, LeEco firmó un contrato con la empresa en noviembre de 2016 por el que se comprometía a pagar 1,6 millones de euros al principio y los seis millones restantes en nueve plazos. En dichos pagos se incluiría un interés anual del 6%.
Sin embargo, LeEco no afrontó ni el primer pago, que debía efectuarse el 11 de diciembre de 2016. Ahora el caso está siendo juzgado por la China International Economic and Trade Arbitration Commission Shanghai Branch. Los dos defensores son Jie Yuting, CEO de la compañía, y Jie Yumin, su hermano. El denunciante les reclama toda la deuda, además de 600 mil yuanes –85 mil euros– en gastos legales. Pero la cosa no acaba ahí, porque LeEco tiene deudas por todos lados.
LeEco mantiene deudas con AAC Technologies Holdings, Compal Electronics –ya saneadas– y Truly International Holdings. Parece que la empresa no pasa por su mejor momento, y es que según su propio fundador, LeEco se ha expandido mucho en demasiados sectores. LeEco se fundó en 2004, y desde entonces se ha metido en el vídeo en streaming, smartphones y televisiones, y planeaba empezar a fabricar coches eléctricos. Estaremos atentos a cómo se desarrollan los acontecimientos.
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