Días 7 y 8:
Pasaré los dos siguientes días en la región de Guilin y Yangshuo, provincia de Guangxi.
Me decanto por visitar lo que todo el mundo recomendaba: el crucero que recorre el río Li y las terrazas de arrozales en Longsheng.
Es una zona rural y la gente es muy auténtica. Todo el mundo te mira por la calle con un descaro aún mayor que en otras regiones, te hacen
fotos e incluso te paran para preguntarte cosas y curiosear.
Fijaros en este chico: paro su
moto en medio de la calle solo para mirarme jajaja estuvo allí 5 minutos sin cortarse un pelo
Aquí no están tan habituados a ver extranjeros.
El hotel es agradable y acogedor, la habitación enorme con baño privado, nada que ver con las minúsculas habitaciones en Shenzhen y Hong Kong.
Los lavabos aquí tienen un agujero en el suelo (foto
..y los enchufes son distintos pero puedes hacer encajar los dispositivos (foto)
La gente aquí regatea con todo, es su forma de entender el comercio y de relacionarse con los demás.
Fijaros en estas vendedoras que auténticas! Me estuvieron persiguiendo 15min. repitiendo constantemente:
- Ten Yuan, ten yuan!!
Y yo les decía: -no money, no money!!
Y ellas repetían 10 yuan, 10 yuan..
Qué graciosas!
Camino de los arrozales el autobús para en un pueblo donde las mujeres llevan el pelo larguísimo.
Presenciamos un baile tradicional y me hacen salir al escenario junto a 3 hombres chinos!!
Consiste en una ceremonia de cortejo y cada hombre debe elegir a la mujer que le gusta, pisándole un pie, y ella le corresponde a él pellizcándole una nalga
Luego la sacas a bailar, intercambias unos presentes y le cantas una canción para seducirla.
Imaginaros el show yo allí arriba. No sabía qué coño cantar y al final improvisé una melodía típica china (canturreando, claro
En la calle sientes olores extraños, ves comidas exóticas, paraditas con cerámica de Buda, animales salvajes, recuerdos de la era de Mao. Se respira un ambiente muy exótico.
Para dirigirme a mi siguiente destino cojo un taxi que me lleva al aeropuerto. Es un taxi privado sin taxímetro y debo negociar antes el precio con el chino.
Me dice 100cny y le ofrezco 70cny. Como ve que no cedo y sigo caminado, al final acepta mi propuesta.
Creo q me ha salido casi tan barato que cogiendo un taxi oficial, según me habían indicado en el hotel podían ser entre 70 y 80 yuanes.
La seguridad sigue siendo espectacular. Puedes irte al lavabo y dejar la mochila en la mesa de un bar con la completa certeza de que nadie va a robarte nada.
La gente no respeta demasiado las colas ni ceden el paso. Cada uno va a la suya, y lo ves en el tráfico de coches como también en el metro, los ascensores o los peatones en la calle.
Todos los coches pitan constantemente y su forma de conducir es brusca. Cuesta creer que puedan funcionar así, sientes como si fuese a ocurrir una catástrofe en cualquier momento.
Tienen preferencia los coches y no los peatones, así que aunque esté el semaforo en verde debes cruzar cuando ya no pase ningún coche :S
En los núcleos urbanos cuesta respirar de la polución que hay, casi ningún dia he visto el sol!!
Aun así, en Guilin todo es más sano y natural y ves estampas como estas: