Si antes os contaba como Samsung va perdiendo cuota de mercado, ahora me llega una noticia que es mas desalentadora para la firma coreana...
Ayer, mientras se estaba celebrando la semifinal entre Alemania y Brasil, un grupo de 20 hombres armados con subfusiles de asalto entraron en una factoría de la firma coreana, en la ciudad brasileña de Campinas, escapando con un botin de aproximadamente 36 millones de dólares en productos de Samsung robados con un total de 40000 dispositivos. Entre los artículos robados se pueden encontrar smartphones, tablets y portátiles, aunque no se han especificado que tipo de modelos eran. Lo que no se sabe de momento es si esta fábrica era de Samsung o simplemente tenía almacenado allí sus productos.
Segun ZDNet, el asalto tuvo lugar ante los propios ojos de más de 200 empleados que estaban realizando sus tareas diarias. Los ladrones entraron a la fábrica durante el turno de noche disfrazados como empleados y empezaron a cargar siete camiones con los productos robados. Mientras algunos de los empleados fueron maniatados durante el robo, el reporte mantiene que la mayoría siguieron trabajando como si no sucediera nada.
Los ladrones actuaron de una manera totalmente inteligente al quitarle la batería a los empleados para que estos no pudieran usar sus propios teléfonos y así les fuera imposible avisar a la policía durante la operación que llegó a las tres horas de duración. Las autoridades brasileñas ahora mismo están investigando el robo y creen que esto podría haber sido realizado con la ayuda de algunos de los empleados que habrían trabajado conjuntamente con los ladrones para acceder a la fábrica y así tener de primera mano información vital para saber dónde se encontraban los productos de valor guardados.
Una de las noticias positivas es que ninguno de los empleados recibió ningún tipo de golpe, tal como menciona Samsung: “estamos al tanto del incidente. Afortunadamente nadie fue herido. Estamos trabajando y cooperando con la investigación policiaca, e intentaremos que no vuelva a suceder“.
Fuente: Androidsis
Segun ZDNet, el asalto tuvo lugar ante los propios ojos de más de 200 empleados que estaban realizando sus tareas diarias. Los ladrones entraron a la fábrica durante el turno de noche disfrazados como empleados y empezaron a cargar siete camiones con los productos robados. Mientras algunos de los empleados fueron maniatados durante el robo, el reporte mantiene que la mayoría siguieron trabajando como si no sucediera nada.
Los ladrones actuaron de una manera totalmente inteligente al quitarle la batería a los empleados para que estos no pudieran usar sus propios teléfonos y así les fuera imposible avisar a la policía durante la operación que llegó a las tres horas de duración. Las autoridades brasileñas ahora mismo están investigando el robo y creen que esto podría haber sido realizado con la ayuda de algunos de los empleados que habrían trabajado conjuntamente con los ladrones para acceder a la fábrica y así tener de primera mano información vital para saber dónde se encontraban los productos de valor guardados.
Una de las noticias positivas es que ninguno de los empleados recibió ningún tipo de golpe, tal como menciona Samsung: “estamos al tanto del incidente. Afortunadamente nadie fue herido. Estamos trabajando y cooperando con la investigación policiaca, e intentaremos que no vuelva a suceder“.
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