Cómo pulir los faros del coche

666 Rojo

Pa mala, yo. A que te pincho.
SuperMod
Máx. Posteador del Mes
Corazón DualSIM
Mensajes
25.113
Puntos
17.814
Móvil
Honor Magic 5 Lite 8/256Gb
Con el paso de los años, y especialmente si el coche duerme a la intemperie, el aspecto del plástico que recubre el faro se va deteriorando hasta matizarse. Es imprescindible tener los faros en buen estado para la seguridad en la conducción, para mejorar la visibilidad nocturna y también para evitar posibles problemas en la ITV, si vuestro coche tiene cierta edad. De hecho, este problema de los faros matizados o amarillentos suele darse en coches con años de antigüedad y que duermen en la vía pública o al exterior, donde los cambios de temperatura y sobre todo, los rayos ultravioleta del sol, afectan a los materiales.


Habreis observado que con el paso de los años, en muchos vehículos se produce la pérdida de transparencia del plástico que recubre el faro. Motivos.: la exposición al sol, la suciedad que se recoge de la carretera y las inclemencias del tiempo, entre otros.

Podemos acudir a un profesional de un taller de reparación de chapa y pintura. Es la solución más rápida y efectiva, y tampoco resulta cara, por norma general; pero si nos queremos ahorrar algunos euros, podemos hacerlo nosotros mismos. Mediante alguno de los numerosos kits de reparación que se comercializan en el mercado, que incluyen el pulimento, las lijas necesarias, la esponja y el líquido protector.

O podemos hacernos nuestro particular kit de reparación, comprando el pulimento líquido, las lijas de granos 800, 1500 y 2000, por ejemplo, y haciendo uso de una pulidora, o bien hacerlo a mano con el uso de trapos de algodón.



937x624cut.jpg

Antes de proceder al pulido es recomendable enmascarar las zonas de la carrocería adyacentes al faro, para evitar dañarlas. Procedimiento:


Limpiar bien el faro.
Si operamos sobre el plástico con suciedad acumulada, el resultado no es el óptimo, e incluso podríamos rallarlo.

Encintar la carrocería alrededor del faro. Es importante proteger la chapa que rodea al faro, ya que al aplicar tanto el pulimento como sobre todo, la lija, podríamos tocar sin querer la carrocería, y afectar el acabado de la pintura. Un buen enmascarado con cinta de carrocero es imprescindible.



[IMG alt="La pasta de pulir es el mejor aliado a la hora de recuperar el brillo de los faros. Debe aplicarse en pequeñas cantidades y repartirse a lo largo de toda la superficie.
"]https://a.ccdn.es/cnet/contents/media/own/2021/9/1284955.jpg/14_61_1278_772//937x624cut/[/IMG]
La pasta de pulir es el mejor aliado a la hora de recuperar el brillo de los faros. Debe aplicarse en pequeñas cantidades y repartirse a lo largo de toda la superficie. Lijado del plástico de policarbonato. A continuación hay que proceder a lijar con la lija de grano más grueso, usando agua para eliminar los restos que se van desprendiendo y mantener la hoja de lija limpia. Hay que lijar de forma progresiva. Del grano más grueso al más fino. Al hacerlo de forma progresiva, la lija menos abrasiva rebaja el “surco” que ha provocado la lija de grano superior.


Hay que utilizar la lija realizando alternando movimientos verticales y horizontales, sin apretar en exceso. Al hacerlo de forma progresiva, la lija menos abrasiva rebaja el “surco” que ha provocado la lija de grano superior.



937x624cut.jpg

El pulido puede hacerse a mano y utilizando lijas de varios niveles de abrasión, o bien hacerlo con una pulidora, con lo que ganaremos tiempo. Esta operación rebaja ligeramente la parte exterior del policarbonato, la que se ha visto afectada por el sol o los cambios de temperatura, para llegar a una capa más “limpia” y transparente. Veréis que la capa resultante es más suave al tacto que la que teníamos al inicio, que estaba llena de rugosidades.


Esta operación de lijado deja el plástico más suave y transparente, pero sin brillo. Para ello hay que:

Limpiar de nuevo el faro con agua, para eliminar restos del lijado, y aplicar a continuación pulimento líquido. El pulimento rebaja superficialmente la capa del plástico para darle el brillo esperado. Podemos hacer esta operación con una pulidora, una boina de lana y repartiendo de forma homogénea el pulimento por toda la superficie del faro. Hay que tener cuidado en no lijar más de lo necesario y en hacerlo sin ejercer demasiada presión sobre el faro, a velocidad lenta. No deja de ser un plástico lo que estamos puliendo, y podríamos dañarlo si nos pasamos.

O bien podemos aplicar el pulimento a mano, con trapos de algodón, frotando en forma circular hasta ver aparecer el brillo.



937x624cut.jpg

Hay que dar varias pasadas y a baja velocidad para dar tiempo a la pasta de pulir para que actúe, y para evitar dañar el plástico. Si no se tiene clara la operación, mejor acudir a un profesional. Finalmente, podemos dar una capa de líquido protector para el plástico, que hará que su deterioro sea más lento con el paso del tiempo. El barniz da la capa de protección original que ha perdido el faro con el lijado y el pulido.


El pulido, en definitiva, mejora el aspecto del faro y su funcionalidad. También contribuye a dar un mejor aspecto al exterior del coche. No obstante, esto no garantiza que al cabo del tiempo el faro vuelva a amarillear, por lo que deberéis volver a hacer la operación de nuevo.

Fuente: Coches. net
 
Con el paso de los años, y especialmente si el coche duerme a la intemperie, el aspecto del plástico que recubre el faro se va deteriorando hasta matizarse. Es imprescindible tener los faros en buen estado para la seguridad en la conducción, para mejorar la visibilidad nocturna y también para evitar posibles problemas en la ITV, si vuestro coche tiene cierta edad. De hecho, este problema de los faros matizados o amarillentos suele darse en coches con años de antigüedad y que duermen en la vía pública o al exterior, donde los cambios de temperatura y sobre todo, los rayos ultravioleta del sol, afectan a los materiales.


Habreis observado que con el paso de los años, en muchos vehículos se produce la pérdida de transparencia del plástico que recubre el faro. Motivos.: la exposición al sol, la suciedad que se recoge de la carretera y las inclemencias del tiempo, entre otros.

Podemos acudir a un profesional de un taller de reparación de chapa y pintura. Es la solución más rápida y efectiva, y tampoco resulta cara, por norma general; pero si nos queremos ahorrar algunos euros, podemos hacerlo nosotros mismos. Mediante alguno de los numerosos kits de reparación que se comercializan en el mercado, que incluyen el pulimento, las lijas necesarias, la esponja y el líquido protector.

O podemos hacernos nuestro particular kit de reparación, comprando el pulimento líquido, las lijas de granos 800, 1500 y 2000, por ejemplo, y haciendo uso de una pulidora, o bien hacerlo a mano con el uso de trapos de algodón.



937x624cut.jpg

Antes de proceder al pulido es recomendable enmascarar las zonas de la carrocería adyacentes al faro, para evitar dañarlas. Procedimiento:


Limpiar bien el faro.
Si operamos sobre el plástico con suciedad acumulada, el resultado no es el óptimo, e incluso podríamos rallarlo.

Encintar la carrocería alrededor del faro. Es importante proteger la chapa que rodea al faro, ya que al aplicar tanto el pulimento como sobre todo, la lija, podríamos tocar sin querer la carrocería, y afectar el acabado de la pintura. Un buen enmascarado con cinta de carrocero es imprescindible.



[IMG alt="La pasta de pulir es el mejor aliado a la hora de recuperar el brillo de los faros. Debe aplicarse en pequeñas cantidades y repartirse a lo largo de toda la superficie.
"]https://a.ccdn.es/cnet/contents/media/own/2021/9/1284955.jpg/14_61_1278_772//937x624cut/[/IMG]
La pasta de pulir es el mejor aliado a la hora de recuperar el brillo de los faros. Debe aplicarse en pequeñas cantidades y repartirse a lo largo de toda la superficie. Lijado del plástico de policarbonato. A continuación hay que proceder a lijar con la lija de grano más grueso, usando agua para eliminar los restos que se van desprendiendo y mantener la hoja de lija limpia. Hay que lijar de forma progresiva. Del grano más grueso al más fino. Al hacerlo de forma progresiva, la lija menos abrasiva rebaja el “surco” que ha provocado la lija de grano superior.


Hay que utilizar la lija realizando alternando movimientos verticales y horizontales, sin apretar en exceso. Al hacerlo de forma progresiva, la lija menos abrasiva rebaja el “surco” que ha provocado la lija de grano superior.



937x624cut.jpg

El pulido puede hacerse a mano y utilizando lijas de varios niveles de abrasión, o bien hacerlo con una pulidora, con lo que ganaremos tiempo. Esta operación rebaja ligeramente la parte exterior del policarbonato, la que se ha visto afectada por el sol o los cambios de temperatura, para llegar a una capa más “limpia” y transparente. Veréis que la capa resultante es más suave al tacto que la que teníamos al inicio, que estaba llena de rugosidades.


Esta operación de lijado deja el plástico más suave y transparente, pero sin brillo. Para ello hay que:

Limpiar de nuevo el faro con agua, para eliminar restos del lijado, y aplicar a continuación pulimento líquido. El pulimento rebaja superficialmente la capa del plástico para darle el brillo esperado. Podemos hacer esta operación con una pulidora, una boina de lana y repartiendo de forma homogénea el pulimento por toda la superficie del faro. Hay que tener cuidado en no lijar más de lo necesario y en hacerlo sin ejercer demasiada presión sobre el faro, a velocidad lenta. No deja de ser un plástico lo que estamos puliendo, y podríamos dañarlo si nos pasamos.

O bien podemos aplicar el pulimento a mano, con trapos de algodón, frotando en forma circular hasta ver aparecer el brillo.



937x624cut.jpg

Hay que dar varias pasadas y a baja velocidad para dar tiempo a la pasta de pulir para que actúe, y para evitar dañar el plástico. Si no se tiene clara la operación, mejor acudir a un profesional. Finalmente, podemos dar una capa de líquido protector para el plástico, que hará que su deterioro sea más lento con el paso del tiempo. El barniz da la capa de protección original que ha perdido el faro con el lijado y el pulido.


El pulido, en definitiva, mejora el aspecto del faro y su funcionalidad. También contribuye a dar un mejor aspecto al exterior del coche. No obstante, esto no garantiza que al cabo del tiempo el faro vuelva a amarillear, por lo que deberéis volver a hacer la operación de nuevo.

Fuente: Coches. net
Ahora en vez del barniz se puede aplicar polimero liquido que por lo que dicen los deja como nuevos y da para unos 4, 6 faros el kit(por unos 50€ mas menos) el procedimiento seria el mismo.
 

Del blog

¿Ha terminado la locura de añadir tantas cámaras a los móviles?

  • Si

  • No

  • No lo se

  • Ya me gustaría...

  • Ya te gustaría...


Los resultados solo son visibles tras votar.
Atrás
Arriba