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Haulage Man
Móviles chinos, ¿merecen la pena?
La principal ventaja que encuentran los consumidores es el precio. Por el dinero que puede costar un móvil de una marca reconocida de gama baja, el usuario puede adquirir un dispositivo chino con características de alta gama, con procesadores similares a los que usan las marcar europeas y norteamericanas. Esto es posible ya que pese a que las grandes marcas fabriquen sus móviles en China, al pasar por distribuidores y por la propia empresa, los precios se elevan. En cambio, en el país asiático se comercializa directamente bajo su marca. La tecnología y los avances los tienen, ya que durante muchos años han fabricado estos aparatos, pero ¿cuáles son las marcas punteras del mercado chino que cada vez triunfan más en España?
HUAWEI
Sin duda, esta fue la primera marca china que llegó al mercado español y la que se hizo más conocida, sobre todo por ser una de las más veteranas en el mundo tecnológico que en China se haya interesado en comercializar telefonía móvil. Su principal cliente fue Vodafone, siendo la empresa que les fabricaba los dispositivos que se vendían bajo su marca, aunque en los últimos años, se decidió por vender directamente sus productos.
Pese a que Huawei ya se hizo un nombre en España, sus modelos solían inspirarse en otra marcas conocidas, como Sony. La mayor similitud se dio con el lanzamiento del modelo Ascend G7, que por 240 euros, daba unas prestaciones muy similares a un Iphone 5, que actualmente puede constar 100 euros más. Además de tener un tener una cámara de 13 megapíxeles por 8 del modelo de Iphone, tiene una mayor resolución de pantalla, aunque sale perdiendo en su capacidad interna. Eso sí, su diseño es prácticamente calcado.
XIAOMI
Si Huawei es la marca china más conocida, Xiaomi es la que más rápido ha entrado en los puestos de honor de los móviles más vendidos. En 2013, esta marca solo era el 5 por ciento del mercado oriental, y el año pasado ya desbancó a Samsung como la empresa que más vendió en este país. El secreto del aumento de estas ventas se dio en sus paralelismos con Apple, tanto en su dirección como en sus modelos.
La inspiración de Xiaomi en Apple se ve claramente en el modelo Mi4, muy parecido también al Iphone 5 aunque en un mayor tamaño. Sin embargo, la similitud es solo en el exterior, ya que este dispositivo oriental mejora ostensiblemente a su competidor. En este caso, Xiaomi no es la típica marca china, ya que el precio de este modelo también es superior al del Iphone situándose en más de 400 euros. Pese a ello, cuenta también con modelos de menor gama y de diseño propio, como el Red Rice, que se situó como el dispositivo chino más vendido en España en 2014.
JIAYU
Esta empresa, que ya fijó distribuidores por España, se centra en móviles de gama media-baja, por lo que los que miran más el bolsillo que las prestaciones tiene aquí un referente. Es posiblemente quien más se aleja de inspiraciones en otras marcas, aunque algunos modelos si que recuerdan a Samsung o Sony.
Su modelo estrella es el G4S, y pese a las numerosas ventajas con las que cuenta, como su pantalla antiarañazos, sus cuatro núcleos, una batería que dura día y medía y sobre todo, su precio (unos 170 euros), sí que tiene algunas quejas generalizadas de usuarios, como su fallo en el gps y su mal comportamiento ante los cambios de temperatura. Aquí los materiales de fabricación si son un problema.
CLONES
Si algo ha hecho famosa a la telefonía móvil china son los clones. Pese a que las grandes marcas de este país se empiezan a despegar ya de esta práctica, el mercado (sobre todo on-line) vive lleno de teléfonos calcados a los más conocidos por los usuarios. Un ejemplo es el Vphone I6, un clon del Iphone 6, que es un modelo exactamente igual pero sin la manzana del logo de la empresa norteamericana. La diferencia más notoria es el precio: de 640 euros baja a tan solo 120, lo que conlleva un procesador y un almacenamiento peor.
Goophone hace este clon del Samsung Galaxy S6
El Samsung Galaxy S6 también tiene a su clon en la figura de Goophone S6. En este caso, la copia es totalmente fiel en su exterior, pero sus características sí distan mucho del original. Con un procesador mucho menos potente, casi tres veces menos memoria RAM y una cámara más modesta que la de Samsung, en lo único que sale ganando este clon es en su batería. Y en el precio, ya que los casi 700 euros del Galaxy S6 se convierten en su clon en tan solo 140.
Curiosamente, las emergentes marcas chinas han empezado a sufrir estos clones. Xiaomi, al sacar su Mi4 de alta gama, comenzó a ver como otros competidores le copiaban el modelo. Su mayor copia es el NO.1 Mi4, que tiene el mismo tamaño que el original y las diferencias exteriores entre los dos modelos es casi inexistente. Eso sí, como en la mayoría de los casos, sus debilidades vienen en los materiales y en su hardware. Solo dispone de un giga de RAM y carece de soporte para tarjeta SD, algo necesario por su poca capacidad. Por ello, la diferencia entre los 400 euros del modelo de Xiaomi y los 135 de NO.1 son entendibles.
RENTABILIDAD
Al final, el mayor apoyo que tienen los móviles chinos son su bajo precio, siempre y cuando se adquieran por Internet. Las nuevas empresas de telefonía que salen del país oriental comienzan a equiparar sus prestaciones a sus máximos rivales norteamericanos o europeos. Los bajos costes de fabricación y su venta directa desde China hacen que los precios sean más competitivos, pero salvando a las principales marcas, el rendimiento de los dispositivos aún quedan lejos.
El auge de los clones también queda suscrito al diseño y a su bajo precio, pero a la larga, lo barato puede salir caro. Las calidades son menores, el tiempo de vida es más corto, y usar la garantía en un producto chino es muy complicado por la lejanía del servicio técnico. Por ello, las empresas chinas empiezan a separarse de estos clones y ya desarrollan sus propios modelos, que como Xiaomi, Huawei o Jiayu, empiezan a liderar las ventas en todo el continente.
Fuente: Diariosur
- Las marcas del país oriental empiezan a cambiar la fabricación de clones por modelos propios que se convierten en los más vendidos del mercado por sus bajos precios
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La principal ventaja que encuentran los consumidores es el precio. Por el dinero que puede costar un móvil de una marca reconocida de gama baja, el usuario puede adquirir un dispositivo chino con características de alta gama, con procesadores similares a los que usan las marcar europeas y norteamericanas. Esto es posible ya que pese a que las grandes marcas fabriquen sus móviles en China, al pasar por distribuidores y por la propia empresa, los precios se elevan. En cambio, en el país asiático se comercializa directamente bajo su marca. La tecnología y los avances los tienen, ya que durante muchos años han fabricado estos aparatos, pero ¿cuáles son las marcas punteras del mercado chino que cada vez triunfan más en España?
HUAWEI
Sin duda, esta fue la primera marca china que llegó al mercado español y la que se hizo más conocida, sobre todo por ser una de las más veteranas en el mundo tecnológico que en China se haya interesado en comercializar telefonía móvil. Su principal cliente fue Vodafone, siendo la empresa que les fabricaba los dispositivos que se vendían bajo su marca, aunque en los últimos años, se decidió por vender directamente sus productos.
Pese a que Huawei ya se hizo un nombre en España, sus modelos solían inspirarse en otra marcas conocidas, como Sony. La mayor similitud se dio con el lanzamiento del modelo Ascend G7, que por 240 euros, daba unas prestaciones muy similares a un Iphone 5, que actualmente puede constar 100 euros más. Además de tener un tener una cámara de 13 megapíxeles por 8 del modelo de Iphone, tiene una mayor resolución de pantalla, aunque sale perdiendo en su capacidad interna. Eso sí, su diseño es prácticamente calcado.
XIAOMI
Si Huawei es la marca china más conocida, Xiaomi es la que más rápido ha entrado en los puestos de honor de los móviles más vendidos. En 2013, esta marca solo era el 5 por ciento del mercado oriental, y el año pasado ya desbancó a Samsung como la empresa que más vendió en este país. El secreto del aumento de estas ventas se dio en sus paralelismos con Apple, tanto en su dirección como en sus modelos.
La inspiración de Xiaomi en Apple se ve claramente en el modelo Mi4, muy parecido también al Iphone 5 aunque en un mayor tamaño. Sin embargo, la similitud es solo en el exterior, ya que este dispositivo oriental mejora ostensiblemente a su competidor. En este caso, Xiaomi no es la típica marca china, ya que el precio de este modelo también es superior al del Iphone situándose en más de 400 euros. Pese a ello, cuenta también con modelos de menor gama y de diseño propio, como el Red Rice, que se situó como el dispositivo chino más vendido en España en 2014.
JIAYU
Esta empresa, que ya fijó distribuidores por España, se centra en móviles de gama media-baja, por lo que los que miran más el bolsillo que las prestaciones tiene aquí un referente. Es posiblemente quien más se aleja de inspiraciones en otras marcas, aunque algunos modelos si que recuerdan a Samsung o Sony.
Su modelo estrella es el G4S, y pese a las numerosas ventajas con las que cuenta, como su pantalla antiarañazos, sus cuatro núcleos, una batería que dura día y medía y sobre todo, su precio (unos 170 euros), sí que tiene algunas quejas generalizadas de usuarios, como su fallo en el gps y su mal comportamiento ante los cambios de temperatura. Aquí los materiales de fabricación si son un problema.
CLONES
Si algo ha hecho famosa a la telefonía móvil china son los clones. Pese a que las grandes marcas de este país se empiezan a despegar ya de esta práctica, el mercado (sobre todo on-line) vive lleno de teléfonos calcados a los más conocidos por los usuarios. Un ejemplo es el Vphone I6, un clon del Iphone 6, que es un modelo exactamente igual pero sin la manzana del logo de la empresa norteamericana. La diferencia más notoria es el precio: de 640 euros baja a tan solo 120, lo que conlleva un procesador y un almacenamiento peor.
Goophone hace este clon del Samsung Galaxy S6
El Samsung Galaxy S6 también tiene a su clon en la figura de Goophone S6. En este caso, la copia es totalmente fiel en su exterior, pero sus características sí distan mucho del original. Con un procesador mucho menos potente, casi tres veces menos memoria RAM y una cámara más modesta que la de Samsung, en lo único que sale ganando este clon es en su batería. Y en el precio, ya que los casi 700 euros del Galaxy S6 se convierten en su clon en tan solo 140.
Curiosamente, las emergentes marcas chinas han empezado a sufrir estos clones. Xiaomi, al sacar su Mi4 de alta gama, comenzó a ver como otros competidores le copiaban el modelo. Su mayor copia es el NO.1 Mi4, que tiene el mismo tamaño que el original y las diferencias exteriores entre los dos modelos es casi inexistente. Eso sí, como en la mayoría de los casos, sus debilidades vienen en los materiales y en su hardware. Solo dispone de un giga de RAM y carece de soporte para tarjeta SD, algo necesario por su poca capacidad. Por ello, la diferencia entre los 400 euros del modelo de Xiaomi y los 135 de NO.1 son entendibles.
RENTABILIDAD
Al final, el mayor apoyo que tienen los móviles chinos son su bajo precio, siempre y cuando se adquieran por Internet. Las nuevas empresas de telefonía que salen del país oriental comienzan a equiparar sus prestaciones a sus máximos rivales norteamericanos o europeos. Los bajos costes de fabricación y su venta directa desde China hacen que los precios sean más competitivos, pero salvando a las principales marcas, el rendimiento de los dispositivos aún quedan lejos.
El auge de los clones también queda suscrito al diseño y a su bajo precio, pero a la larga, lo barato puede salir caro. Las calidades son menores, el tiempo de vida es más corto, y usar la garantía en un producto chino es muy complicado por la lejanía del servicio técnico. Por ello, las empresas chinas empiezan a separarse de estos clones y ya desarrollan sus propios modelos, que como Xiaomi, Huawei o Jiayu, empiezan a liderar las ventas en todo el continente.
Fuente: Diariosur