Yo acudiría a Sherlock Holmes. Tenemos varias pistas. Sabemos que al ladrón le gustan las sardinas en tomate y usa estropajos cutres (no son vileda) para fregar los platos. Por tanto, frega los platos a mano porque no tiene lavavajillas y debe vivir sólo porque fijo que si tuviera novia hubiera mangado un iPhone 6 para la chavala. Yo creo que eso reduce mucho el número de sospechosos. Seguro que la policía está al acecho.